El 18 de marzo de 1925, uno de los brotes de tornados más mortíferos en la historia registrada generó al menos 12 tornados importantes y abarcó una gran parte del medio oeste y el sur de los Estados Unidos. En total, al menos 751 personas murieron y más de 2298 resultaron heridas, lo que convirtió al brote en el brote de tornados más mortífero, el 18 de marzo en el día de tornados más mortífero y 1925 en el año de tornados más mortífero en la historia de los EE. UU. El brote generó varios tornados destructivos en Tennessee, Kentucky e Indiana el mismo día, así como importantes tornados en Alabama y Kansas. Además de los tornados confirmados, sin duda hubo otros con impactos menores, cuyas ocurrencias se han perdido en la historia. El brote incluyó el tornado Tri-State, el tornado más mortífero en la historia de los Estados Unidos y el segundo más mortífero registrado en la historia mundial. La trayectoria de 352 km (219 millas) de largo que dejó el tornado, cuando cruzó desde el sureste de Missouri, a través del sur de Illinois y luego hacia el suroeste de Indiana, también es la más larga jamás registrada. El reanálisis meteorológico moderno ha sugerido que la longitud de trayectoria extremadamente larga y la vida útil informadas en los relatos históricos quizás se atribuyan de manera más plausible a múltiples tornados independientes que pertenecen a una familia de tornados, en lugar de un tornado único y continuo. Aunque no está clasificado oficialmente por la NOAA, el Tri-State Tornado es reconocido por la mayoría de los expertos (como Tom Grazulis y Ted Fujita) como un tornado F5, la calificación máxima de daño emitida en la escala de Fujita.