Las iglesias cristianas, tanto en su venerable tradición occidental como en la milenaria oriental, dedican una jornada solemne a conmemorar un evento que marcó los albores del cristianismo con una tragedia inaudita: la masacre de los niños inocentes. Estos pequeños, víctimas de un decreto despiadado, son venerados como los primeros mártires de la Iglesia temprana, habiendo perecido indirectamente por Cristo durante el frenético y cruel empeño del Rey Herodes el Grande por eliminar al Niño Jesús, recién nacido y percibido como una amenaza a su poder.

La Crueldad de Herodes y el Sacrificio de Belén

El contexto de esta conmemoración se remonta al relato bíblico del Evangelio de Mateo (2:16-18). El Rey Herodes I, conocido históricamente como "el Grande" (c. 73-4 a.C.), fue un monarca idumeo-romano, famoso por sus ambiciosos proyectos de construcción, pero también por su paranoia extrema y su brutalidad. Temiendo la profecía de un "Rey de los Judíos" que nacería en Belén –revelada por los Magos de Oriente que habían venido a adorarlo– Herodes ordenó la matanza de todos los niños varones menores de dos años en Belén y sus alrededores. Aunque el número exacto de víctimas no se especifica en las Escrituras y ha sido objeto de debate histórico (la tradición a menudo lo exagera a miles, mientras que la demografía de un pequeño pueblo como Belén sugeriría docenas), la brutalidad del acto y el sufrimiento que causó son innegables. Estos infantes, ajenos al plan divino, se convirtieron en las primeras víctimas de la ira desatada contra el Mesías, derramando su sangre en el lugar del nacimiento de Jesús.

La Fiesta de los Santos Inocentes: Fechas y su Evolución Litúrgica

La fiesta de los Santos Inocentes se observa tradicionalmente el 28 de diciembre en la liturgia de las iglesias occidentales, como la Católica Romana y algunas protestantes. En contraste, las iglesias orientales, incluidas las Ortodoxas, suelen celebrarla un día después, el 29 de diciembre, siguiendo sus propios calendarios litúrgicos. Originalmente, durante los primeros siglos del cristianismo, antes del siglo V, la conmemoración de los Santos Inocentes no era una festividad independiente. Se observaba en coherencia con la solemnidad de la Epifanía (celebrada el 6 de enero), que conmemora la manifestación de Jesús al mundo gentil a través de la visita de los Magos. La masacre de Belén era vista como una consecuencia directa de la Epifanía, un testimonio sombrío del conflicto que el nacimiento de Cristo provocaría. Sin embargo, con el tiempo, a medida que la Iglesia desarrollaba su calendario litúrgico y la veneración de los mártires cobraba mayor relevancia, la conmemoración de los Inocentes se escindió, convirtiéndose en un festival separado, destacando su propio significado sacrificial.

Un Día de Lamento y Reflexión

Históricamente, esta fecha fue considerada un día de profundo lamento y ayuno, especialmente en Roma. Lejos de ser una celebración jubilosa, el Día de los Santos Inocentes era un recordatorio conmovedor del sufrimiento que acompañó la llegada del Salvador al mundo, un contrapunto sobrio a la alegría de la Navidad. Era una jornada para la reflexión sobre la inocencia perdida y la brutalidad del poder terrenal, y para honrar a aquellos que, sin comprenderlo, ofrecieron sus vidas por la causa de Cristo. Este tono de dolor y penitencia contrasta fuertemente con la naturaleza festiva de la temporada navideña circundante, sirviendo como un punto de inflexión para meditar sobre el verdadero costo de la redención.

Preguntas Frecuentes (FAQ)

¿Quiénes fueron los Santos Inocentes?

Fueron los niños varones menores de dos años de Belén y sus alrededores que fueron masacrados por orden del Rey Herodes el Grande en su intento de matar al recién nacido Jesús, como se relata en el Evangelio de Mateo.

¿Por qué se consideran los primeros mártires?

Se les considera los primeros mártires porque, aunque no murieron conscientemente por su fe, su sacrificio fue una consecuencia directa de la persecución contra Jesús. Su muerte, por lo tanto, se interpreta teológicamente como un martirio "vicario" o "involuntario" por Cristo.

¿Cuándo se celebra el Día de los Santos Inocentes?

La fecha de su conmemoración varía ligeramente: las iglesias occidentales (como la Católica) lo observan el 28 de diciembre, mientras que las iglesias orientales (Ortodoxas) lo hacen el 29 de diciembre.