Se otorga la primera patente de Japón al inventor de una pintura a prueba de herrumbre.

La ley de patentes japonesa se basa en el principio del primero en presentar y se aplica principalmente por la Ley de Patentes (特許法, Tokkyohō) de Japón. El artículo 2 define una invención como "la creación muy avanzada de ideas técnicas utilizando la ley de la naturaleza".